Un tipo entra en un bar y le pregunta al camarero si le daría una cerveza gratis si le enseña algo alucinante. El camarero dice que sí, de modo que el tío se saca un hámster del bolsillo, y la pequeña criatura empieza a bailar y a cantar “Highway to Hell”, de AC/DC.
“¡Sí que es alucinante!”, dice el camarero, y le da al tipo su cerveza gratis. Él se la bebe, mientras el hámster está sentado en la barra, mordisqueando un cacahuete.
“Si le enseño otra cosa increíble, ¿me daría otra cerveza gratis?”, pregunta el hombre. El camarero acepta, así que el tío saca un minúsculo piano y una rana. Entonces, mientras el hámster toca el piano, la rana canta “Great Balls of Fire”, de Jerry Lee Lewis.
El camarero, alucinado, le da otra cerveza gratis. Un hombre vestido con traje, que ha estado observando todo el tiempo, ofrece 10000€ por la rana y el tipo acepta.
“¿Está chalado?”, pregunta el camarero. “Podría haber hecho una fortuna con esa rana.”
“¿Puede guardar un secreto?”, pregunta el hombre. “El hámster es ventrílocuo.”
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